Durante las operaciones de perforación, el estado de la broca tiene un impacto directo en la eficiencia y calidad del trabajo. Ya sea que se trate de un vástago roto, una punta dañada o una pared del orificio rugosa, puede ser un “obstáculo” para el progreso de la producción. Con una inspección cuidadosa y un mantenimiento adecuado, no sólo podrá prolongar la vida útil de sus brocas, sino también mejorar la eficiencia y reducir costos innecesarios.
1. Un vástago roto inutilizará el taladro. Compruebe que la broca esté montada de forma segura en el mandril, manguito o casquillo. Si la broca está instalada correctamente, puede deberse a un contrapunto o casquillo dañado, momento en el que deberías considerar reemplazar o reparar la pieza dañada.
2. El daño de la punta probablemente esté relacionado con la forma en que maneja la broca. Para mantener la punta de la broca perfecta, no utilice un objeto duro para introducir la broca en el casquillo. Asegúrese de retirar y guardar con cuidado la broca después de su uso.
3. Si terminas con las paredes del agujero rugosas, lo primero que debes asegurarte es que no se debe al uso de una punta desafilada o a un afilado incorrecto de la punta. Si este es el caso, es necesario volver a afilar la punta o reemplazar la broca.
4. Si la punta central de la broca se agrieta o se parte, puede deberse a que la punta central se esmeriló demasiado. También es posible que la holgura de los labios de la broca sea insuficiente. En ambos casos, es necesario reafilar o reemplazar la broca.
5. Es necesario comprobar el espacio libre del labio, el labio y el talón astillados y es posible que deba volver a afilar la punta o reemplazar la broca.
6. Rotura de esquina exterior. La presión de alimentación excesiva es una causa común. Si está seguro de que la presión de alimentación está regulada adecuadamente y no sobrepresurizada, verifique el tipo y nivel de refrigerante.
Hora de publicación: 26 de agosto de 2024